f) La denuncia
En su vida y predicación hubo algo mucho más provocativo que el repetido quebrantamiento de las leyes y tradiciones judías. Me refiero aquí a los constantes ataques, que aparecen en la predicación de Jesús, contra los dirigentes judíos, contra los grupos más influyentes de aquella sociedad, contra las autoridades, sobre todo las autoridades religiosas. Y lo peor del caso es que Jesús hizo todo eso en público, delante de la gente, para que todo el mundo se enterara.[...]
El estilo de Jesús no era el secretismo y la falsa prudencia, que tira la piedra y esconde la mano. Jesús dijo a los cuatro vientos, lo que tenía que decir. Por eso, sin duda alguna, sus denuncias y ataques contra los dirigentes adquieren obviamente una gravedad singular.
[...]En el evangelio de Juan, los enfrentamientos, entre Jesús y los dirigentes judíos, se repiten constantemente[...] a esos dirigentes les dice Jesús que ni escuchan a Dios ni observan su mensaje; les echa en cara que sólo buscan honores y no llevan dentro el amor de Dios; los llama idólatras[...] les dice que no conocen a Dios y los califica de ladrones y bandidos.
Es claro que si todas estas cosas no estuvieran en los evangelios, nos resultaría casi imposible creerlas. Nadie se imagina a Jesús hablando de esta manera, porque la imagen que de él nos ha ofrecido la predicación y la literatura religiosa[...]como una persona dulce y bonachona, es completamente falsa.
g) Por qué actuó Jesús de esta manera
[...] hay que recordar el estado de sometimiento y dependencia en que vivía aquel pueblo. Desde el 587 a.c. habia vivido y seguía viviendo en continua dependencia de los grandes imperios vecinos[...] peor sin duda que la opresión política, era la opresión socioeconómica. Palestina era pobre y la riqueza estaba concentrada en pocas manos. Frente a la miseria en que vivía el pueblo, había fortunas enormes[...]sobre todo hay que recordar la terrible carga, que representa para el pueblo, los numerosos impuestos que tenía que pagar. Estos impuestos eran de dos clases: los religiosos, que pagaban al templo y a los sacerdotes, y los civiles, que cobraban por parte del rey Herodes en Galilea y el gobernados romano en Judea.
A pesar de todo, la verdadera opresión[...](llegaba) de la intrepretación legalista de la religión. La ley religiosa, que debía ayudar al hombre en la búsqueda de su camino hacia Dios, había degenerado, con las interpretaciones sofisticadas y las tradiciones absurdas, en una terrible esclavitud impuesta en nombre de Dios.
[...]contra este estado de cosas es contra lo que Jesús se manifiesta resueltamente. En definitiva lo que estaba en juego era el bien del hombre, la liberación de los oprimidos, el sufrimiento del pueblo. Por eso Jesús fue tan radical en su conducta y predicación. Por eso hizo lo que hizo. Y por eso termino condenado y ajusticiado. Eso fue el destino de Jesús. Y a ese mismo destino llama Jesús a todos los que quieran seguirle. A partir de este estado de cosas, podremos ahora comprender lo que Jesús nos viene a decir cuando establece una relación directa entre el seguimiento y la muerte de cruz. Es evidente que Jesús vivió una mistica muy profunda en su relación con el Padre del cielo. Pero es evidente también que esa mística le llevó a un compromiso total por el bien del hombre. Para un creyente auténtico no hay ni puede haber mística sin compromiso.
Jose M. Castillo
Quiero compartir a través de este blog algo de mi búsqueda espiritual. Publicaré escritos, frases, imagenes, que me ayudan a crecer en ese camino, y en algún momento incluso mis propias conclusiones y opiniones.Mi fe es la cristiana, mi formación es católica, mi gran referencia es Jesús. Pero en este camino de búqueda espiritual voy apoyándome también en toda una serie de disciplinas, prácticas y pensamientos que nos regala oriente para crecer interiormente, y despertar a nuestra Luz interior.
Camino

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